Vecinos y comerciantes de las peatonales céntricas se comunicaron con El Tribuno para manifestar su malestar e indignación por situaciones de disturbios, ruidos molestos y falta de higiene de las peatonales a causa de la presencia de personas que acostumbran a dormir en los accesos de diferentes locales comerciales y también sobre las escalinatas de un organismo público, sobre la Caseros al 600. Piden que las autoridades del Ministerio de Seguridad tomen cartas urgente en el asunto.
Consumen drogas
“Este problema comenzó hace un año. Empezamos a ver a tres personas, pero después se fueron sumando más, a veces llegan a ser nueve, incluida una mujer rubia y su pareja quienes llevan una valija. La situación se fue agravando porque no tan solo consumen alcohol, sino también drogas, y lo peor es que hasta tienen relaciones sexuales“, contó una vecina, quien pidió la reserva de su identidad por temor a represalias.
Y añadió: “No sabemos a quién pedir auxilio. Estamos desesperados. Ojalá las autoridades nos escuchen. No hay ministro de Seguridad que haya resuelto esta situación. Somos más de 15 las familias afectadas y también muchos comerciantes”.
Reunión con el ministerio de Seguridad
En tanto, un comerciante de una galería ubicada en la zona manifestó: “Nos hemos reunido con autoridades del Ministerio de Seguridad de la Provincia porque ya nos han roto vidrieras y encontramos las puertas orinadas, las cerraduras forzadas, los gabinetes de gas con cosas raras y nos dieron un argumento que no convence para nada: nos dijeron que era una problemática social, pero pensamos que igual la tienen que resolver. Ese no es un justificativo porque no es posible que vivamos como rehenes acá. Lamentablemente no hay respuesta de nadie”.
Peatonal Caseros
Los vecinos comentaron que los conflictos se dan sobre la peatonal Caseros y también se extienden a la Plazoleta IV Siglos e incluso a la glorieta de la PLAZA 9 DE JULIO.
“Estas personas que viven en situación de indigencia han transformado esta zona en un verdadero aguantadero porque hacen sus necesidades a la vista de nosotros. También se desvisten. Esto es tierra de nadie. Rompen las plantas, ensucian todo. Además, tienen 10 perros que los llevan a todas partes”, dijo otra vecina.
Contó que el sábado pasado, por la madrugada, tuvieron que llamar varias veces al 911. “Entre ellos mismos se pelean. Los perros que tienen son agresivos y quieren morder a la gente que pasa. Había una jauría tremenda, se mordían entre ellos. Nosotros mirábamos azorados todo. Es un problema de nunca acabar. Todas las mañanas hay un olor nauseabundo que te descompone, ni hablar de la suciedad en el piso”, aseguró.
- “La Policía siempre viene y les piden que se retiren de las escaleras de la Dirección General de Rentas, pero después se van y se meten en la entrada de dos zapaterías y cuando ya no tienen donde meterse se quedan cerca de los canteros que están en medio de las peatonales”, sostuvo.
- Los residentes de la zona contaron que fueron a la comisaría cercana en busca de una solución. “Nos dijeron que presentemos una nota. No lo podíamos creer. ¿Por qué tenemos que hacer una nota si es algo esencial para resolver? No podemos vivir así en pleno centro. Es un lugar para pasear, ver vidrieras, tomar un helado, salir con la familia, no un lugar para ser tomado por esta gente”, expresaron.
Una de las vecinas añadió: “Ni hablar de cómo afecta esto al turismo. Es una muestra horrorosa. Ya se arregló la plaza 9 de Julio y si queremos ponerla en valor, al igual que el centro, así no se puede porque estas personas con su mal accionar ensucian todo. Es peligroso y no podemos normalizar esta situación. No es natural que vivamos así”.
Otro vecino manifestó: “Queremos que el gobernador reconsidere a las autoridades de Seguridad porque no han hecho nada para resolver este conflicto. No nos escuchan y una política de Estado fundamental no puede estar en manos incapaces. Tienen que trabajar por la seguridad, comprometerse con el vecino. Aparecieron el primer tiempo para las fotos aquí, para mostrarse y se olvidaron. Yo les pregunto, ¿qué pasaría si tuvieran estas personas en la cuadra donde viven? ¿Estarían contentos? Donde vivimos nosotros no es nada barato. Cuesta muchísimo, entonces ¿por qué tenemos que permitir esto? Eso es un paseo, un centro de compras, no es posible que nos tengamos que topar con todo esto”, finalizó.
Ayer, alrededor de las 15, se observaba a un grupo de cinco personas en situación de consumo problemático de sustancias en el ingreso a una zapatería, sobre la peatonal Caseros.
Fuente: eltribuno
