La fría estadística marcará en unos días que Salta habrá llegado a las 2.000 muertes por COVID-19. Será una cifra cruel e inexorable. Hasta ayer sumaban 1.956 el total de decesos a causa de la pandemia en la provincia.
Dentro de esos números, que ni se aproximan a reflejar el dolor y la tragedia por cada una de las vidas perdidas, hay un dato que trae esperanza en la lucha que se mantiene contra el coronavirus: los índices de letalidad de la enfermedad bajaron considerablemente entre los pacientes salteños. Así lo ilustra la relación de fallecimientos por cantidad de casos de COVID (que es la forma de medir la letalidad) que se reportaron en lo que va del 2021, que se redujo a más de la mitad en comparación con lo que sucedió durante el año pasado.
Desde el inicio de este año hasta ayer se reportaron 49.413 contagios de SARS-COV-2 en Salta y entre ellos hubo 932 personas que murieron. Es más del doble de casos que los 22.133 registrados desde mayo de 2020 (cuando ingresó la pandemia) hasta el final de diciembre, cuando hubo 1.024 fallecidos.
En prácticamente la misma cantidad de meses, en 2021 el 1,9% de los contagiados perdieron la vida en Salta y en 2020 ese porcentaje fue de 4,6%.
Vacunación
La explicación a la reducción de la letalidad es la vacunación, de ahí la vital importancia de ese instrumento para terminar con la pesadilla epidemiológica que atraviesa la humanidad.
De acuerdo a la última actualización del Monitor Público de Vacunación de la Nación, en Salta se aplicaron 777.419 vacunas contra la COVID-19, de las cuales sólo 147.456 (el 19% del total de inoculaciones) corresponden a segunda dosis. De esa manera, completaron el esquema completo de vacunación el 36% de la población más vulnerable al coronavirus, ya que son 400 mil los salteños en esa condición, según las estimaciones que hizo el Ministerio de Salud de la Provincia al inicio de la pandemia.
Casos y víctimas
Con 35.338 contagios registrados hasta ayer, el departamento Capital es el más afectado por la COVID-19. Le siguen en cantidad de casos Orán, con 4.737; San Martín, 4.156; Metán, 3.527 y Anta, con 3.475 casos.
Capital es donde mayor número de fallecidos hubo, con 792 víctimas desde que arrancó la pandemia, de acuerdo a datos del área de Salud de la Nación (en los informes de acceso público de la Provincia no se especifica el detalle de dónde son los decesos). Siguen Orán, con 151 vidas perdidas, San Martín (136), General Güemes (121), Rosario de Lerma (98) Metán (71), Rosario de la Frontera (66), Cerrillos (59), Anta(50) y Cafayate (48).
En detalle
La semana pasada, el jefe de Sala de Situación del Ministerio de Salud de la Provincia, Miguel Astudillo, brindó a El Tribuno un detallado panorama sobre los fallecimientos por COVID-19 en Salta. Con un corte de datos al 22 de junio último, pudo precisar que con 1.146 fallecidos por cada millón de habitantes, la provincia se encuentra por debajo de la media nacional, que es de 2.129. Esto significa que es la segunda jurisdicción con tasa más baja en relación a la población, detrás de Misiones, que tiene 359 defunciones por millón. Mientras que la Ciudad Autónoma de Buenos Aires es el distrito con mayor tasa de mortalidad, con 3.415 muertes por cada millón de habitantes.
Dentro de Salta, el departamento que mayor tasa de mortalidad tiene es Los Andes, con 2.492 fallecidos por millón y, el que menos tiene es La Candelaria, con 310. En tanto, la Capital tiene una tasa de 1.128 muertes por millón de habitantes.
El pico máximo de fallecimientos por COVID-19 en Salta se dio en la semana epidemiológica 39, en octubre, con 135 defunciones en esa semana.
Durante ese período la tasa de letalidad fue del 5%, cuando de cada 100 personas enfermas de COVID-19, cinco morían. En la actualidad ese porcentaje bajó al 2,5%.
Fuente: Eltribuno